El piriodismo de RTVE
Hoy, domingo de resaca, me pasan un video de la entrevista de Ana Ibáñez al presidente de Ecuador Rafael Correa. Vean:
Minuto a minuto y pregunta tras pregunta, observo como una periodista aparentemente profesional va quedando en evidencia y termina siendo dialécticamente vapuleada por un presidente ecuatoriano que no se deja intimidar por los intereses neoliberales de una cadena pública fuertemente politizada por los mercados y totalmente alejada del rigor periodístico.
Rafael Correa, casi sin despeinarse y sin perder en ningún momento la sonrisa, toma rápidamente el control de una desaforada entrevista y va defendiendo firmemente los típicos argumentos de las políticas (mal-denominadas) 'liberales', para establecer una tesis socialista de gran coherencia y fundamento.
Y no, no es una errata el título de este post, pues la piriodista Ana Ibáñez debió sonrojarse en varias ocasiones tras ese maquillaje típicamente televisivo mientras su interlocutor le daba el repaso profesional de su vida. Supongo que, al terminar la entrevista, sentiría la necesidad de pirarse la piriodista y abandonar el plató en busca del consuelo neoliberal del sr. Somoano.
Un último apunte. Ha sido una pena que el señor Rafael Correa, al hablar sobre los derechos de información, libertad de prensa y medios de comunicación, no le haya encasquetado un pedrusco así:
"Me sorprende, srta. Ibáñez, que usted me hable de que en mi país no existe libertad de prensa, o que pretendemos censurar y nacionalizar medios de comunicación que han servido única y exclusivamente a intereses particulares de grandes empresas bancarias, que además han quebrado y dejado deudas al pueblo ecuatoriano mientras sus responsables viven impunemente en Miami.
Pues insisto, srta. Ibáñez, me sorprende que usted me diga eso desde un medio de comunicación supuestamente público que responde claramente a los intereses partidistas del gobierno de Mariano Rajoy, porque se abolió una norma de consenso en el que anteriormente se elegía a la cúpula directiva mediante UNANIMIDAD, y ahora puede ser elegida UNILATERALMENTE por el gobierno de turno atentando grabemente a la independencia del medio, sin mencionar, además, la purga ideológica realizada sobre muchos periodistas de RTVE de indudable profesionalidad como lo fueron Ana Pastor, Juan Ramón Lucas o la supresión de espacios críticos con cualquier gobierno como lo pudo ser Carne Cruda de Radio 3. Y estos ejemplos de cercenamiento de la libertad informativa en un medio de comunicación público son intolerables y no son los únicos, pues existen evidencias claramente discriminatorias e inconstitucionales sobre el espionaje y selección de profesionales de RTVE para su veto en cualquier labor ejecutiva, como recientientemente se desveló la existencia de un 'Comando Rubalcaba'. Dudo mucho que de ser totalmente aséptico e independiente este medio de comunicación, esta entrevista me la estaría realizando una periodista de la talla de Ana Pastor y no, con todos mis respetos, alguien como usted."
Una respuesta tan elaborada es fácil hacerla a posteriori, lejos del directo, pero sin duda, de haberse producido en un universo paralelo, el Rafael Correa paralelo habría hecho llorar a la piriodista.
Hoy, domingo de resaca, me pasan un video de la entrevista de Ana Ibáñez al presidente de Ecuador Rafael Correa. Vean:
Minuto a minuto y pregunta tras pregunta, observo como una periodista aparentemente profesional va quedando en evidencia y termina siendo dialécticamente vapuleada por un presidente ecuatoriano que no se deja intimidar por los intereses neoliberales de una cadena pública fuertemente politizada por los mercados y totalmente alejada del rigor periodístico.
Rafael Correa, casi sin despeinarse y sin perder en ningún momento la sonrisa, toma rápidamente el control de una desaforada entrevista y va defendiendo firmemente los típicos argumentos de las políticas (mal-denominadas) 'liberales', para establecer una tesis socialista de gran coherencia y fundamento.
Y no, no es una errata el título de este post, pues la piriodista Ana Ibáñez debió sonrojarse en varias ocasiones tras ese maquillaje típicamente televisivo mientras su interlocutor le daba el repaso profesional de su vida. Supongo que, al terminar la entrevista, sentiría la necesidad de pirarse la piriodista y abandonar el plató en busca del consuelo neoliberal del sr. Somoano.
Un último apunte. Ha sido una pena que el señor Rafael Correa, al hablar sobre los derechos de información, libertad de prensa y medios de comunicación, no le haya encasquetado un pedrusco así:
"Me sorprende, srta. Ibáñez, que usted me hable de que en mi país no existe libertad de prensa, o que pretendemos censurar y nacionalizar medios de comunicación que han servido única y exclusivamente a intereses particulares de grandes empresas bancarias, que además han quebrado y dejado deudas al pueblo ecuatoriano mientras sus responsables viven impunemente en Miami.
Pues insisto, srta. Ibáñez, me sorprende que usted me diga eso desde un medio de comunicación supuestamente público que responde claramente a los intereses partidistas del gobierno de Mariano Rajoy, porque se abolió una norma de consenso en el que anteriormente se elegía a la cúpula directiva mediante UNANIMIDAD, y ahora puede ser elegida UNILATERALMENTE por el gobierno de turno atentando grabemente a la independencia del medio, sin mencionar, además, la purga ideológica realizada sobre muchos periodistas de RTVE de indudable profesionalidad como lo fueron Ana Pastor, Juan Ramón Lucas o la supresión de espacios críticos con cualquier gobierno como lo pudo ser Carne Cruda de Radio 3. Y estos ejemplos de cercenamiento de la libertad informativa en un medio de comunicación público son intolerables y no son los únicos, pues existen evidencias claramente discriminatorias e inconstitucionales sobre el espionaje y selección de profesionales de RTVE para su veto en cualquier labor ejecutiva, como recientientemente se desveló la existencia de un 'Comando Rubalcaba'. Dudo mucho que de ser totalmente aséptico e independiente este medio de comunicación, esta entrevista me la estaría realizando una periodista de la talla de Ana Pastor y no, con todos mis respetos, alguien como usted."
Una respuesta tan elaborada es fácil hacerla a posteriori, lejos del directo, pero sin duda, de haberse producido en un universo paralelo, el Rafael Correa paralelo habría hecho llorar a la piriodista.
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